El motor de la vida
A veces, creo que todos lo sabemos por experiencia, las cosas se ponen especialmente cuesta arriba. Si se trata de una racha más o menos breve, la pasamos con cierta soltura. Pero cuando empieza a alargarse en el tiempo, llega a suponer un auténtico desafío para el aguante y la paciencia de quien lo está pasando.
En esos momentos, no suele valer de mucho que te den consejos prefabricados, de los que tanto abundan por ahí. Si lo pasas mal, lo pasas mal por muchas palabras bienintencionadas que te digan. Sí, es bueno que te acompañen, que no te sientas solo, que te ayuden en lo posible. Pero la batalla es tuya, no te la pueden quitar.
Puede ser un sufrimiento o un malestar de cualquier tipo, que vaya haciendo mella poco a poco. No tiene siquiera por qué ser algo brutal, con que sea algo que se repita continuamente, durante mucho tiempo, ya puede destrozarte moral e incluso físicamente. Y no digamos si eso que se repite es algo brutal.
Conozco a un matrimonio excepcional, que desean con toda su alma ser padres. Y que todos sus embarazos han acabado en aborto espontáneo. Ese … Sigue leyendo