En ocasiones es bueno echar la vista atrás y ver el camino por el que has transitado y el que estás tomando. Como autor independiente he tocado distintos géneros, incluso más de los que se suelen recomendar (de hecho, lo que se suele recomendar es especializarse en uno, algo que no me atrae nada, pero que se supone que es lo mejor para el marketing). He escrito libros autoconclusivos y series. Y el futuro se abre en un amplio abanico que no podré recorrer por completo porque el día tiene las horas que tiene y no hay manera de añadirle más. Pero bueno, al menos recorreré parte de ese abanico. Y tengo la esperanza de que me acompañarás en ese viaje.
No ficción
Yo empecé escribiendo no ficción (bueno, salvo esos intentos de obra de teatro y de novela que escribí de pequeño). Y aunque el tirón de la ficción, sobre todo de la ficción especulativa, es muy fuerte, estoy convencido de que seguiré escribiendo no ficción.
Dentro de este campo me centro en la religión y el humanismo. Busco ayudar al lector a mejorar su vida religiosa y a afrontar la vida de manera positiva.
La escala de la felicidad
Todo comenzó con un libro muy particular. Casi diría que extraño. Ya anteriormente te conté cómo había empezado a escribir y no quiero repetirme. Solo diré que es un libro que nació a partir de mis aportaciones en un foro y que las pulí y las di una coherencia interna basada en una pequeña teoría sobre el camino a la felicidad basada en la pirámide de Maslow.
Este fue mi primer libro, La escala de la felicidad. Y tengo que reconocer que ha envejecido muy mal. Hoy por hoy lo he descatalogado. En un primer momento pensé en dejarlo estar, pero no deja de ser un libro mío, una parte de mí. Me gustaría darle una nueva vida, así que es posible que lo reescriba. No se tratará de una nueva edición, sino de un nuevo libro basado en él. Al menos, ese es el plan.
Cartas desde el corazón a un hijo no nacido
Mi segundo libro partió de la idea de un padre que le quiere escribir cartas a su hijo mientras todavía sigue en el vientre de la madre, para ir preparándole para lo que se va a encontrar en el mundo. Ha envejecido mejor que La escala de la felicidad, pero aun así creo que lo puedo mejorar bastante. Por eso lo he descatalogado también a la espera de encontrar el momento en el que me pueda poner en serio con él.
Además, acortaré el título. Es demasiado largo para mi gusto, al menos para mi gusto actual.
Meditando el Santo Rosario
Con esta serie hemos dejado el orden cronológico, ya que mi tercer libro fue Llorando sangre. Pero prefiero ser más ordenado. Ya que no lo soy en los papeles que tengo por casa, al menos que lo sea escribiendo esta entrada.
El objetivo de esta serie de libros es ayudar al lector a introducirse en los misterios del Santo Rosario. Yo mismo no lo empecé a rezar hasta hace relativamente poco, un par de años quizá. Y me di cuenta de dos cosas: muchas veces lo rezamos mecánicamente, como si tuviéramos que demostrar nuestra capacidad de recitar de memoria avemarías a la vez que pensamos en cualquier otro asunto.
Lo segundo de lo que me di cuenta es de que es una oración impresionante que nos transporta a momentos clave de la historia de la salvación.
Había estado inmerso en el mundo de los Ejercicios Espirituales de san Ignacio de Loyola (una auténtica joya) y pensé: ¿por qué no contemplar desde dentro los misterios del Rosario? Así que me lancé a comenzar esta serie de libros en los que para cada misterio, lo primero que hago es proponer unas pequeñas reflexiones conectadas con la vida de cada día y con la doctrina de la Iglesia para terminar con una contemplación al estilo ignaciano en la que el lector se sumergirá en cada misterio, viviéndolo desde dentro, como un participante, no como un observador pasivo, haciéndolo parte de él.
Ficción
Ahora vamos con los libros de ficción, que también son unos cuantos.
La ficción tiene una particularidad que la hace muy importante para mí: permite llegar al lector desde la imaginación, transportarle a otros escenarios, incluso a otros mundos, de tal forma que se pueda ver el mundo real desde cierta distancia. Eso, sobre todo en el caso de la ficción especulativa, es maravilloso por la cantidad de posibilidades que ofrece para explorar la verdad.
En mi ficción procuro dejar un sabor a esperanza. Ya hay muchas tragedias en el mundo como para aportar más sufrimiento sin sentido. Mis personajes podrán pasarlo realmente mal, pero al final del libro quiero que el lector se abra a la esperanza.
Llorando sangre
Mi primera novela. Un thriller sobrenatural en el que el padre Munker, un sacerdote jesuita, tiene que investigar las lágrimas de sangre que llora una estatua de la Virgen en una recóndita parroquia escocesa, además de los mensajes que uno de los parroquianos supuestamente recibe de la misma Virgen.
Es un libro que se basa en el procedimiento de la Iglesia para la investigación de apariciones y fenómenos sobrenaturales. Por supuesto, los hechos no son reales. Ni siquiera el pueblo en el que ocurre lo es. Pero eso no quita para que tengan su base de verdad en otros fenómenos similares.
Además, este libro supuso la presentación de cierto personaje, el padre Nowak, que me resultó fascinante desde que apareció en mi mente.
Apocalipsis: el día del Señor
Segunda novela y último thriller sobrenatural, al menos de momento. En Llorando sangre el protagonista era el padre Munker, sin ninguna duda. En esta novela quería que hubiera más. El primero de todos, ese sugerente sacerdote polaco, el padre Nowak. Pero no es el único. Mientras los hechos relatados en el Apocalipsis se suceden y el Anticristo crea su reino en este mundo, los dos sacerdotes, el Papa, una importante mujer e, incluso, un agente del Mossad se enfrentarán a sus propios temores y al nuevo poder que acaba de despertar.
Memorias del ocaso
Esta serie es muy especial. Yo, por si no lo sabías, soy informático. Y, de hecho, lo que siempre me resultó más interesante fueron temas como la inteligencia artificial, los algoritmos genéticos, la realidad virtual, la robótica, la vida artificial…
E imaginé un mundo en el que dos programadores, sin pretenderlo, la lían parda. Crean una inteligencia artificial que se les escapa de las manos y a la que no consiguen detener en un principio.
Un mundo en el que el ser humano depende cada vez más de las máquinas, en el que los robots van cobrando más y más importancia.
Solo fue un principio, el germen de la historia. Esta se tendría que ir desarrollando, pero no quería esperar a verla completa. Quería que el lector pudiera descubrirla casi a la vez que yo. Por eso elegí el formato en el que está, similar a las novelas por entregas que había antes. En cada volumen, mediante breves relatos, voy dando pinceladas de la evolución de ese mundo, que se va ampliando y haciendo más complejo.
Es una apuesta arriesgada y lo sé. ¿Una serie de libros que ni siquiera se sabe cuánto durará? Justo lo contrario de lo que se recomienda desde el punto de vista del marketing. Más aún en un autor poco conocido como yo. Pero ¿qué te puedo decir? Las opiniones que me han llegado son muy positivas. Es un mundo en evolución, y esa evolución necesita su espacio. No puedo encorsetarlo en un par de libros.
Para mí es fascinante la idea de desarrollar así esta historia. Y si te gusta la ciencia ficción con inteligencia artificial, robots, realidad virtual… quizá deberías darle una oportunidad.
Sí, te lo acabo de intentar vender. 😉 Y espero que haya funcionado.
Por cierto, estos libros me los está traduciendo al inglés Lisa Nicholas.
Magia, heroísmo y esperanza
Este libro de relatos de fantasía deja claro incluso en el título lo que mencionaba antes sobre mi objetivo al escribir: la esperanza.
En él te encontrarás asesinos a sueldo, telépatas, monstruos marinos, a la Santa Compaña, a un niño al que maltratan en el colegio, a otro aterrorizado por un monstruo al que solo él puede ver… Un libro con sufrimiento, pero también con héroes y, sobre todo, esperanza.
Es una colaboración entre la ilustradora Cristina Vaquero y yo. Cada relato tiene una ilustración suya, al igual que es suya la ilustración de la cubierta.
Hasta aquí llega este repaso por mis libros. Si todavía no te has leído ninguno, te invito a repasar la lista y elegir uno. Y, si ya has leído alguno, te invito a seguir leyéndolos.